Visitar Aranjuez es visitar pasado, un espectacular pueblo perteneciente a la comarca de Las Vegas de la comunidad de Madrid. El Real Sitio de Aranjuez muestra en su trazado urbano, obra del arquitecto Santiago Bonavía por encargo del monarca Fernando VI, el modelo de calles rectas y paralelas con grandes avenidas. En el recinto urbano destacan las construcciones surgidas en torno a la plaza de San Antonio, tales como la Casa de Oficios de Aranjuez, diseñada por Juan de Herrera, o la de los Infantes, de Juan de Villanueva. La ciudad fue escenario, en 1808, del famoso levantamiento contra el valido Godoy, el motín de Aranjuez, y hasta ella llegó en 1851 el primer ferrocarril español que inaugurado por Isabel II, partió de Madrid.
Palacio Real de Aranjuez
El Palacio Real era el lugar de residencia real, a Felipe II se debe la edificación de este Palacio, comenzado en 1561 por Juan Bautista de Toledo y continuado por Juan de Herrera. A lo largo de la dinastía de los Borbones sufrió varias reformas, sobre todo en el reinado de Felipe V, concluyéndose definitivamente las obras en la primera mitad del siglo XIX. Sin duda algo digno de visitar.
Guia turistica por el Palacio Real de Aranjuez
El edificio actual muestra su planta original cuadrada estructurada en torno a un patio central. En el lado oriental se sitúa el acceso principal, presidido por una monumental escalera obra de Bonavía. Entre las más importantes dependencias del conjunto arquitectónico destacan la saleta de la Reina, con obras de Lucas Jordán; el despacho de la Reina, con el lienzo de Brueghel El florero; el salón del Trono, con la decoración mural de la Alegoría de la monarquía, parees de terciopelo rojo y mobiliario rococó; el salón de Porcelana por su abigarrada decoración, obra de los napolitanos Schepera y Gricci; el salón de Baile, y la sala de las Dos Hermanas, que imita a su homónima de la Alhambra de Granada.
En la parte trasera del palacio se extienden los jardines del Parterre, obra de Boutelou, y a través de un puente, el jardín de la Isla. Decoran este vergel numerosas fuentes y estanques dedicados a dioses y semidioses de la antigüedad. Entre los jardines más notables destacan el del Príncipe, también obra del francés Boutelou concluido por Juan de Villanueva, autor de las puertas de hierro. En este espacio cubierto de arboledas, fuentes, cenadores e invernaderos, y en su extemo oriental, se encuentra la casita del Labrador, encargo realizado por Carlos IV a Isidro González Velázquez para espacio de recreo de la familia real. El arquitecto diseñó un edificio de tres cuerpos en torno a un patio central, de un claro y elegante estilo neoclásico. A partir de la escalera principal se accede a las numerosas salas y saletas, entre las que cabe citar la sala de las Estatuas por los bustos romanos de filósofos clásicos que alberga; el salón de baile, de claro estilo pompeyano y con techo de Bayeu y Maella,, autor, este último, de la decoración de la bóveda del salón del Billar; y la saleta de la Reina y el comedor, recubiertos con sedas.
En un quiebro del río Tajo se sitúa, dentro de las instalaciones del jardín, la casa de los Marinos, construcción encargada por Carlos III para albergar las barcazas o falúas que desde palacio llevaban a los monarcas hasta la Casita del Labrador. En la plaza del Castillo se ha construido un moderno edificio que contiene algunas de aquellas falúas, como la utilizada por Carlos IV, decorada por Maella, o la de María Cristina, con forma de templete.
Viajar a Aranjuez
Si tienes proyectado viajar a Aranjuez, no dejes de visitar el gran palacio Real de Aranjuez, ya que, es uno de los grandes tesoros de Madrid, así como sus románticos parques. dotados de una espectacular belleza, y es que ir a Aranjuez es visitar la belleza y el romanticismo en estado puro.